A dónde se quiere llegar

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Si algo faltaba para entender que las “protestas” encabezadas por dirigentes de segunda línea de la anterior gestión, en manera desesperada de presencia, sin dudas equivocada, ya que se trata de desconocer la expresión popular que consagró al actual gobierno, obviamente con sus programas electorales y todo lo demás, creemos los supera esta forma más grosera de ir  al disparate. Como señalamos  antes, un celebrado actor equivoco su apreciación de un Héroe destacado, como San Martin cuando se negó a ser usado por los rivadavianos partidarios -ya entonces-  de una anexión extranjera para sostener sus proyectos, pata reprimir las montoneras gauchas de Ramírez, Artigas y los demás caudillos federales, y se niega para seguir su campaña por le Independencia de América, terminado exilado con amenaza para su vida… y éste desvalido dirigente actual, lo coloca como símbolo de sus protestas para enfrentar hoy, pleno siglo XX una fracción política interna mínima, contra la mayoría elegida por el Pueblo soberano apenas  meses atrás.

Luego, vimos y vemos todos los días expresiones de odios y envidias mal disimulados por aquella derrota, enfrentando poco menso a diario con un poderoso sector de la prensa nacional, toda tarea que aplique la nueva gestión en situación difícil como la que le toca llevar adelante.

Así se sigue convocando, con uso amoral de la enseña patria a un enfrentamiento, ridículo entre argentinos; pero, puede hasta entenderse que esos errores son comunes cunado la razón se ciega y el entendimiento, váyase a saber por qué causa, ninguna clara y demostrable, lleva dirigentes en derrota a tratar de oscurecer el presente en vez de buscar ayudar a un futuro realizable.

Ahora bien, entre nosotros incluso con una cantidad de votos irrelevante, traer a escena y colocarla en pleno Centro Cívico. cuando  todo Bariloche está a la espera de una llegada salvadora  de turistas con todos los problemas conocidos, la imagen macabra del Ku Kux Klan yanqui repudiado incluso por los EE.UU y el mundo normal, por sus atrocidades realizadas por sus miembros en contra de ciudadanos de raza negra, judíos u homosexuales, quemándolos vivos la mayoría de las veces, en recuerdo para el espanto de la gente normal, no creemos tenga explicación entre nosotros, más aun repetimos, en que se está haciendo lo imposible para reabrir el turismo hacia Bariloche, con estas expresiones públicas.

Y para mayor absurdo para expresarse en contra de una vacuna reconocida en el mundo civilizado, cuando el virus y sus consecuencias letales siguen presentes, y a nadie se obliga a usarla.

Éramos de los que creíamos ser una Sociedad medianamente culta, alcanzando relieves destacados a nivel internacional, apropiada para recibir turista de calidad y no solo visitas temporales. Nos sorprende la falta poco menos que total de atención oficial y de su principal dirigencia empresaria para que estos hechos no vuelvan a ocurrir. Las críticas serias han sido de afuera, Bariloche parece no advertir, siquiera de la imagen que dio al exterior.

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