La iniciativa surge de la Jefatura de la Policía de Río Negro en razón de la posibilidad de que aquellos agentes que se hayan recuperado de COVID-19, puedan de manera voluntaria donar plasma para ayudar a otras personas justamente a recuperarse.
La propuesta tuvo una gran recepción en la mayoría de los policías que en su momento dieron positivo, y fue así que decidieron finalmente realizar la donación de plasma con la premisa de contribuir en la mejora de la salud de las personas contagiadas por el virus.
Este acto es un ejemplo más de la vocación de servicio hacia la comunidad por parte de efectivos policiales rionegrinos que desde el inicio de la pandemia están cumpliendo con su trabajo exponiéndose a los riesgos ya conocidos por el coronavirus.
El plasma es la porción líquida de la sangre donde se encuentran suspendidos los glóbulos rojos, los blancos y las plaquetas. Posee una cantidad de proteínas muy importantes, donde se hallan los anticuerpos.
El plasma de pacientes recuperados tiene anticuerpos que desarrollaron para expulsar la enfermedad. Que un enfermo los reciba es clave para su defensa y batallar contra el virus. Se aplica a los pacientes graves que puedan recuperar.
El jefe de la Regional Segunda de General Roca, Comisario General Antonio Jesús Mandagaray se sumó a la iniciativa de ser donante al igual que otros efectivos de esa ciudad y de otras de la provincia que se vieron afectados por el COVID-19.
Mandagaray destacó la rápida respuesta afirmativa de los policías recuperados ante la propuesta de donar, “el espíritu altruista cada vez me sorprende. A pesar de que no es lindo haber sido positivo tuvimos mucho acompañamiento de los compañeros que nos daban aliento así que, al consultarles a estos muchachos, se sumaron y nos pusimos a disposición de Salud”.
Mandagaray resaltó que está acción es una contribución más para poder ayudar a sanar a aquella persona que pueda necesitarlo, “se trata de ayudar para que la gente se mejore. Es una caricia al alma para nosotros tener la posibilidad de dar una herramienta más a los médicos que están luchando todos los días para mejorar a la gente”, señaló.
Por otro lado, remarcó la importancia de esta iniciativa voluntaria, ya que refuerza aún más el trabajo que ya viene haciendo cada efectivo durante la pandemia, “todos los que somos ahora donantes voluntarios de plasma volvimos a trabajar y a estar de vuelta en las filas, todos los días concientizando a la gente, aconsejando el uso de barbijos, que mantengan la distancia que no salgan si no tienen que salir, la lucha de todos los días. Entonces esto es un ingrediente más de aquellos que estuvimos un poco complicados de salud y hoy le podemos dar una mano a alguien entonces en buena hora que así sea”.
Si bien para cada policía que dio positivo de COVID–19, fue difícil la recuperación sobre todo por el aislamiento a cumplir, es notorio el compromiso con la tarea a desarrollar. “Nosotros queríamos volver a trabajar así que apenas tuvimos el alta volvimos a estar en el ruedo y acá estamos poniendo un granito más de arena para colaborar con la prevención de esta enfermedad”, concluyó Mandagaray.