San Carlos, sus comienzos…

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Pasaron varios años para dar forma a la intención de crear centros poblados en zonas inhabitadas del país. Luego de una serie de decretos se llega finalmente al 3 de mayo de 1902. Con unos 850 habitantes dispersos alrededor del lago Nahuel Huapi, dedicados a diversas actividades comerciales, principalmente ganadería y explotación de madera. Familias de los más diversos orígenes, alemanes, austriacos, suizos que viajaron a chile como colonos, que debido a la gran escasez de trabajo, cruzaron los Andes en busca de un mejor futuro.

Españoles que llegaron desde Buenos Aires como troperos y arreadores, otros, buscadores de oro y también aventureros.

Los argentinos no eran muchos, dedicados a las tareas campestres, contaban con escasos puestos oficiales. Entre los originarios estaban los «locales» y chilenos, muchos niños, casi doscientos nacimientos habían registrado para esos años en Bariloche. Que vivían en hogares de pioneros esperanzados en la firma del decreto por el que se entregarían tierras en propiedad al fundarse un pueblo a denominarse San Carlos… 3 de mayo de 1902 el decreto del presidente Julio Argentino Roca.

Aquel día lo existente en San Carlos eran solo dos pequeñas viviendas, un galpón para acopio de lanas dedicado a local de venta denominado justamente «San Carlos», propiedad de Don Carlos Wiederhold. Según las mensuras, el lote destinado a la creación del pueblo era lindero a su almacén, esto sumado a la proximidad del rustico muelle construido en la costa del lago, -única vía de comunicación ya que no llegaban caminos a San Carlos- fueron un factor decisivo para que una vez conocida la decisión del decreto, se construyeran cuatro o cinco casitas modestas con igual cantidad de familias. 

Asentamientos precarios, ya que aún no se habían fraccionado los terrenos a entregar. En el mes de junio el Capitán Mariano Fosbery, decidió trazar provisoriamente una calle «para que el pueblo no crezca torcido», según el. 

Un grupo de soldados comenzó a trabajar junto a un voluntario poblador, Benito Boock, para medir las cuadras, esta calle es la hoy conocida calle Mitre. Trazada sin teodolito en su momento, luego la mensura resultaría casi exacta cuando la comprobó el ingeniero Apolinario Lucero, un 27 de diciembre de 1902, cuando comenzaron oficialmente los trabajos de fraccionamiento y entrega de lotes.

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