En el marco del Día Mundial para Combatir la Desertificación y la Sequía, el 17 de junio, se promueve a la toma de conciencia de los efectos de la actividad del hombre sobre el uso que hace del suelo y las consecuencias que ello tiene.
El problema ambiental en el partido Adolfo Alsina de Río Negro, es por la contribución del desmonte para el pastoreo o la agricultura, como el uso del suelo por el hombre, y a su vez la ocurrencia de incendios, la sequía, y cenizas volcánicas como eventos naturales al proceso de desertificación.
Se trata de un fenómeno complejo que involucra la extinción local de especies como Poa, Stipas, entre otras; la erosión del suelo, la modificación de la estructura de la vegetación y la disminución de la productividad biológica del ecosistema.
En este contexto donde es vital tomar conciencia sobre el agua, el suelo, las prácticas agropecuarias sustentables y la producción de alimentos, es necesario conocer la actualidad rionegrina, para comenzar con propuestas y acciones que favorezcan un desarrollo sostenible y sustentable en el tiempo.
Es importante saber que se hablará de desertificación cuando los cambios tienen lugar por acción del hombre.
En ese sentido los nuevos desafíos que se plantean son, el uso racional de los recursos naturales, el banco de semillas, manejo racional de la hacienda y el pasto, siempre pensando en la producción de alimentos para los rionegrinos y el mundo.
Los incendios disminuyen la cobertura tanto de hierbas como de especies leñosas. Entre 1993 y 2003 hubo más de 1000 incendios que afectaron cerca de 9.000.000 hectáreas de Monte (Informe Geo-Argentina 2004). De los registros tomados por el Área de Recursos Naturales (perteneciente al Ministerio de Producción y Agroindustria de Río Negro) solo en la temporada 2015/2016 se observó un total de 1.500.000 hectáreas afectadas por incendios en el Este de la provincia, abarcando los departamentos Adolfo Alsina, General Conesa y Pichi Mahuida.
Los efectos ambientales derivados son la pérdida de biodiversidad, aumento de especies o sustratos por sobre otros, cambios en la composición y fisonomía del paisaje, arbustificación, (dominan arbustos sobre pastos), fragmentación del ambiente, pérdida de suelo, disminución de la resiliencia (la capacidad que tiene el sistema de poder sobreponerse a una situación extrema o negativa).