En el marco del Día Mundial se la Tierra, se realizó en Bariloche una Jornada de visibilización sobre la Geoingeniería climática con gran participación de la ciudadanía local y de ciudades vecinas. La misma fue convocada y organizada por un grupo de vecinos autoconvocados de Norpatagonia, con el acompañamiento de la Defensoría del Pueblo.
Más de 200 personas, a lo largo de toda la jornada, que comenzó con un análisis e intercambio de lo que está ocurriendo en Bariloche, el proceso de investigación llevado adelante por el grupo, una muestra fotográfica, una mesa informativa y la proyección de videos con imágenes documentadas en la región.
También participaron concejales de Dina Huapi y Trevelin, legisladores de la provincia de Río Negro, físicos, biólogos, trabajadores del centro atómico, vecinos y vecinas, preocupados por el avistamiento de las estelas que dejan los aviones a su paso, que duran varias horas, se ensanchan y forman nubes que bloquean el sol. El fenómeno ha sido documentado a lo largo de los últimos dos años con fotos, videos, días, horarios, números de vuelos, por vecinos de toda la región. La preocupación radica en los componentes contaminantes y riesgosos para la salud que podrían contener esas estelas y que podrían ser aplicaciones de la llamada “geoingeniería climática” que se ha documentado visualmente y con muestras de aire, suelo y agua en otras partes del mundo. Si bien diferentes posturas manifiestan que se trata de vapor de agua condensada, lo cierto es que no se sabe a nivel local que componentes pueden tener estas estelas, que crean cielos con figuras y formas nunca antes vistas, sumado a la incertidumbre de un clima cambiante y desconcertante.
Entre las disertaciones estuvo, Alejandro Beletzky quien habló sobre “La arrogancia del poder global: ¿Por qué niegan lo evidente?” en donde hizo alusión al desarrollo global de la geoingeniería en curso, a pesar de que la ONU resolvió suspender todo tipo de avances sobre esta materia, por la inexistencia de estudios que determinen los riesgos y las consecuencia en la salud de la población y de la tierra.
Para finalizar y aún con la sala expectante se proyectó el documental “¿Por qué diablos nos fumigan?” donde meteorólogos, biólogos, ambientalistas, y productores agrícolas afectados cuentan los desastres que está generando la aplicación de la gestión de la radiación solar con dispersión de aerosoles estratigráficos generando cambios bruscos en el clima, desastres naturales como sequias e inundaciones, alteraciones en la vegetación general, muerte de especies, etc.
Tras esta primera jornada se plantea la necesidad de ser escuchados por los organismos estatales y las instituciones públicos privadas que están en condiciones de llevar adelante análisis ambientales, siendo este el principal objetivo del grupo convocante.
“Todos queremos estar equivocados y que las estelas no contengan metales como aluminio, bario y estroncio”, datos que se desprenden de las definiciones de la Nasa y de los estudios de los expertos de la ONU. Pero para estar seguros y arribar a la verdad “es necesario hacer los estudios ambientales, y no sólo quedarnos con las teorías científicas cuyas explicaciones pueden ser pertinentes, pero no se basan en muestras y análisis locales, reales y concretas.”
Por ello los vecinos entienden que es fundamental impulsar los monitoreos de aire, suelo y agua correspondientes, y obtener los resultados esperados que llevarían calma a la población.
En las fotos, vemos algunas tomadas el miércoles 26 de abril de 2017 en el Cerro Tronador entre las 14:30 y 15hs sacadas por un vecino de Bariloche.