Los caminos, senderos y costas, suman cientos de kilómetros, por lo que es imposible implementar un sistema de recolección de residuos. No importa el lugar que se elija, siempre hay que llevarse los residuos, y si es posible clasificarlos.

Por ello, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
• No quemar ni enterrar la basura que se genera.
• Llevar bolsas o recipientes para regresar con los residuos (incluye papel higiénico, pañales y toallitas) y depositarlos al volver a la ciudad cabecera.
• Planificar la salida para cargar solo lo necesario.
• Usar los sanitarios disponibles. Si no hay, no dejar el papel higiénico en el lugar: guardalo en una bolsa y llevarlo de regreso. Las heces deben enterrarse a unos 60 metros de cualquier curso de agua. Si no tenés una bolsa o no podés llevarte el papel, enterralo junto con los excrementos en el “pocito de gato” aproximadamente 20 centímetros de profundidad. Recordá que las toallitas, pañales y tampones no deben enterrarse: siempre deben volver con vos.
Las heces y el papel higiénico en la superficie son un grave riesgo sanitario, y generan contaminación visual para quienes buscamos una grata experiencia en las áreas silvestres.
Desde hace años trabajamos junto a los visitantes, prestadores turísticos y pobladores en la reducción progresiva y la restricción para la utilización de los plásticos de un solo uso en los parques nacionales.
Esta iniciativa promueve la disminución gradual del uso de estos objetos, y busca desalentar la utilización específica de bolsas y envoltorios, botellas, vajilla y utensilios plásticos descartables, soportes de helados, hisopos y productos que contengan micro esferas de plástico. Gracias por sumarte en este propuesta.