Región Sur: la obra que cambio la vida de sus pobladores

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A un año de su puesta en funcionamiento, el Gasoducto de la Región Sur se consolida como una de las obras más trascendentales en la historia de Río Negro. El Gobierno Provincial, con fondos propios y a través del emblemático Plan Castello, llevó gas natural por primera vez a más de 17.000 vecinos y vecinas de Ramos Mexía, Sierra Colorada, Los Menucos y Maquinchao, marcando un antes y un después en la vida cotidiana de toda la región.

Nunca antes en la historia de la provincia se había logrado un avance de esta magnitud en la región más fría, extensa y menos poblada de Río Negro. El gas natural llegó a los hogares para quedarse, transformando las rutinas, los inviernos, la salud y las oportunidades de miles de familias.

La obra abarcó 365 kilómetros de extensión a través de la estepa rionegrina, y se convirtió en la inversión pública por habitante más significativa de la historia provincial. Su ejecución fue el resultado de una decisión política que resolvió priorizar la calidad de vida de quienes viven más lejos, donde más se siente el frío, por encima de los costos de una obra millonaria. La equidad territorial fue uno de los pilares fundacionales del Plan Castello, y lo sigue siendo en el actual Plan de Obras 2023-2027.

“Esta obra cambió rotundamente y para siempre la vida de miles de rionegrinos y rionegrinas. Cuando tomamos la decisión de avanzar con el gasoducto, lo hicimos con el convencimiento de que el Estado tiene que estar donde más se lo necesita. Hoy, esta red no solo calienta hogares, también genera oportunidades, arraigo y desarrollo”, afirmó el Gobernador Alberto Weretilneck, principal impulsor del proyecto desde sus orígenes.

Esta no fue una obra más: fue una decisión estratégica que priorizó a una región históricamente postergada. Ejecutar 365 kilómetros de gasoducto en las condiciones climáticas de la Región Sur fue un enorme desafío técnico y humano, pero sabíamos que el impacto sería transformador. Hoy hablamos de calidad de vida, de salud, de desarrollo. Esa es la verdadera dimensión de esta obra”, expresó el Ministro de Obras y Servicios Públicos, Alejandro Echarren.

La obra ni siquiera se detuvo durante la pandemia de COVID-19. Con todos los recaudos sanitarios, se continuó trabajando para cumplir un compromiso histórico con las comunidades.

Hospitales y centros de salud mejoraron sus condiciones de atención, reduciendo las consultas por enfermedades respiratorias y permitiendo a los equipos trabajar con más confort y eficiencia. “Contar con gas natural en los hospitales de la Región Sur nos permitió reorganizar la atención, mejorar el estado general de las instalaciones y cuidar mejor a nuestros pacientes, especialmente las personas mayores y en los meses más duros del invierno”, señaló el Ministro de Salud, Demetrio Thalasselis.

Hoy, en la Región Sur, ya no se depende del clima, ni del camión que trae la leña o la garrafa. Hay gas, hay calefacción, hay agua caliente, hay dignidad. Hay una nueva forma de vivir.

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