La diversidad y el virtuosismo de la cultura local se hizo presente el pasado sábado, en el Velódromo Municipal. Música originaria, tango con tintes afros, blues, rock, música instrumental, el arte plástico local y la danza fueron los que representaron a la ciudad en esta jornada central.
La primera en representar a la ciudad fue la cantautora originaria Anahi Rayen Mariluan, quien recorrió canciones en el idioma de su Pueblo, y de su autoría plasmadas en sus tres discos Kisulelain (no estamos solas), Amulepe Taiñ Purrun, (Que siga nuestro baile), y su última creación, Makewenuy (amigo del cóndor). Fue acompañada por Leopoldo Caracoche (voz y guitarra), y Natalia Cabello (Piano).
Siguió Patagonia Milonguera, grupo integrado por Nora Pessolano en voz y guitarra, y Andrés Larzen, en teclado y percusión, y que sumó en esta oportunidad a Marisa Di Giambattista en piano, José Falcón en percusión, Nacho Barúa en tambores, y Leo Ramos en bajo.
El blues, jazz y algo de funk se hizo presente con el sello de Pedro Bellora & Blues Sparrings, integrado por Hernán Quarto (batería), Pablo Fainstein (bajo), Germán Lema (órgano hammond), Ezequiel Gutierrez (corneta), Pipo Reyes (saxo tenor), Mariana Gluch (coros y percusión), y Pedro Bellora (guitarra y voz).
El rock llegó con Alterego que puso calor a la tarde con covers de renombradas bandas como Queen, Cramberries, Blur, Guns’n Roses, Soda Estéreo, Divididos, Sumo y Catupecu Machu. Pablo Bazterrica a cargo de la voz demostró una gran versatilidad dentro de los estilos elegidos por la banda para interpretar. Fue seguido por Marian Venanti (primera guitarra y coros), Lucas Ives (bajo y coros) y Facundo Condori (batería).
Entre banda y banda la Compañía de Danza & Shows Juan Gallo puso ritmo a la tarde, y dio continuidad a lo que fue una verdadera maratón de artistas locales. Diversas intervenciones coreográficas se lucieron con un impecable vestuario para cada una de las apariciones.
El joven guitarrista Iván Piombi subió al escenario antes de la presentación de cierre con Abel Pintos. Con el Velódromo Municipal con más de 10 mil personas esperando ese momento, Piombi supo apaciguar las ansiedades con los que muchos de los presentes lo recibieron, y tema tras tema supo ganarse el reconocimiento del público.
Un desafío inmenso para este joven de tan solo 23 años, y que presentó su primer disco instrumental en el mes de junio, “Leyendas sobre cuerdas” que sonó anoche, acompañado por un artista plástico local, Mariano Cabrera, que en tiempo casi récord creó una obra en vivo, donde plasmó la fuerza de estos lados sureños con sus montañas, bajo la inspiración de los acordes de este virtuoso guitarrista que propuso temas con mezclas de folk, flamenco, celta, estilos musicales en los que ha incursionado Piombi durante su corta trayectoria pero con un futuro prometedor. Piombi pidió durante su presentación que “no se olviden de apoyar a los artistas locales”, a lo que fue contestada su demanda con un fuerte aplauso.