¿Por qué no darnos una oportunidad entre nosotros?
Creemos sea este el momento mejor para sentarse a una mesa y charlar por lo menos, entre dirigentes que realmente quieran a Bariloche y su desarrollo, incluso con alguna agrupación política subsistente.
Asegurando lo suyo, pero no cerrándose solamente en ello.
La situación general peor no puede ser, aunque de seguirse así, probablemente lo logremos, entonces, advertidos de ello, con la incapacidad y/o desinformación demostrada por varios de los “mejores”, que no saben salir del enchastre socioeconómico logrado, bueno es el momento de la dirigencia local para tratar de resolver sobre lo suyo, sin violencias, ni dislates de los que luego nos arrepentimos.
Así aun escúchanos voces, muchas veces altisonantes, sobre los beneficios que nos traería llevar adelante un híper centro de congresos, etc.
Ya hemos hablado y mucho de ello, destacamos una vez más la opinión de un vecino ya fallecido, que sabia y mucho del tema y su desarrollo precisamente de ellos, en lo privado como en lo oficial, nos referimos a d. Alfredo Sauter, líder en lo privado y desatacado funcionario en lo oficial que calificara a este portento para el proceso barilochense, como “un galpón de lujo”; opinión que compartimos…
Nuestros dirigentes, aun los amigos que lo conocieran y compartieran sus esfuerzos, fueron mal atendidos y llevados a desastre por la dirigencia local, como el Natatorio Municipal y Paseo de la Costanera. Lo mismo, ninguno se esforzó por al menos tratar de entenderlo al Centro que dejo una base con varios millones de dólares invertidos por el gobierno del proceso militar, cedido a la misma, y nunca esa dirigencia arrimo aunque fuera una moneda a su terminación y/u otro destino social o económico como no fue abandonarlo a su destino, o algo peor.
Lo concreto, la dirigencia opto y opta por seguir a la espera de la inversión oficial; lo mismo para con el también híper Parque industrial, tecno productivo, etc., en este caso aun peor sin definir objetivos, ni fines ciertos a alcanzar, ofreciéndose naturalmente a compartir su administración…
Y apostamos a esa reunión esperada siempre, que nunca se concreta, seguramente alentada en la benevolencia climática para con nosotros que tan poco aprendemos, y cada día parecemos alegrarnos de avanzar contra su sostenimiento.
Arriesgar para ganar más es fundamental, especular con ello y nada más, nos tiene así.
Para quienes tantas veces nos opinan en contrario, en Inglaterra, cuna del Capitalismo y su Revolución industrial se fundamenta el sin fin de lucro como base de todo objetivo productivo cierto: la tierra inglesa, o sea sus escasas islas originarias, son propiedad de la Corona, no admiten especulación con ellas, las presta, arrienda por años y décadas, para todo lo licito que se quiera hacer en las mismas; pero, no admite especulación con ellas.
Razonando y aceptando razones aún podemos hacer y mucho.