Mirar un poquito mas allá de la nariz
Los destrozos provocados en los últimos días en nuestra remodelada calle Mitre, paradójicamente la principal arteria comercial , social, etc. de la ciudad, parece que provoco un algo así como reencontrarse con responsabilidades obvias a cualquier cuidad del mundo que se tenga como tal, se gaste en ella inversiones de capital extranjero en productos productivos o no, sus comercios, propietarios, etc., cobren sus productos, precios, etc., por “ser calle Mitre”, y cuanto se quiera agregar “la barilochense” al respecto, y decidirse de una vez a actuar con un poco más de madurez ciudadana.
Está claro que pese a todo lo que se diga sobre el particular el tema no da para mucho más que decidirnos si queremos desarrollarnos, o seguir a los tropezones caprichosos del momento.
Es claro en todas partes, menos acá, que los paseos de compras, y esencialmente caracterizados para atender en ellos lo mejor y más destacado del comprador que nos visite, son peatonales.
En nuestra ciudad por esos absurdos que nos caracterizan, nunca se alentó la idea y en lo posible se la desalentó, contra todo razonamiento serio al tema; pero… así vamos.
Con el mismo espíritu enrevesado, se elaboró este “Proyecto Productito” para una calle que no produce nada en términos clásicos, por el contrario comercia, y bajo su amparo se desarrollan actividades secundarias menores que no pasan de lo transitorio, cuando no marginal.
Con lo que hasta hemos convertido a una actividad útil y licita como reza nuestra Constitución Nacional, a la publicidad, que ahí siquiera se sabe quién es responsable de las maniobras equivocadas, y por las que se sucedieran varias administraciones.
Que nos vamos a extrañar ocurra lo que ocurre en algún barrio lejano y no muy organizado de nuestro extenso ejido, si no sabemos que pasa delate nuestro?
Mas o menos parecido al disparate estacionario que vemos en Costanera y/o en pleno centro cuando el Turismo estudiantil toma la ciudad a su servicio.
Los destrozos, propios de una decadencia cultural, similar a la que provoca los mencionados desencuentros de ordenamiento urbano, esta vez sacudió la modorra de nuestras dirigencias que pareciera se aprestan a discutir si calle Mitre en adelante debe ser solo peatonal…
Elemental Watson, diría el famoso detective.
Es absolutamente absurdo hacer semejante gasto, productivos o no, para que los colectivos, camiones y similares la destrocen a poco de habilitada.
No ya por la decadencia cultural de algunos no adaptados a nuestra progresista ciudad, si no por la fuerza de los hechos, simplemente.
La prueba la dieron los primeros Colectivos de Turismo Estudiantil que pasaron (y siguen pasando) por calle Palacios apenas se los dejo hacer…
El Transporte Pesado, no está permitido en ninguna ciudad, y menos en sus calles principales.
La dirigencia menos informada, lo sabe.
Ahora bien, si lográramos alcanzar un principio de entendimiento en una dirigencia que parece insistir en una inercia apacible y peligrosa a todas luces, que para comprobarlo basta mirar alrededor, en todo lo que no nos animamos a hacer por si propios dejamos pasar y lo que fuera una ciudad en sostenido crecimiento, aun hasta nuestros días, y un también sostenido atraso en desarrollo, totalmente realizable y esperado toda la vida.