El Ente de Desarrollo de la Cordillera avanza con un inédito trabajo de despeje forestal en ambas riberas del río Ñireco en el centro de Bariloche, un área que se había vuelto impenetrable debido al avance de sauzales, con caída de árboles y ramas, generando problemas de seguridad a los vecinos y provocando desbordes e inundaciones en las viviendas.

El operativo comenzó cerca de la desembocadura del Ñireco en la costa del lago Nahuel Huapi  y llegará luego de tres etapas al barrio 150 Viviendas, a lo largo de 2,5 kilómetros de ribera, en un despeje que a futuro se piensa para generar un área verde para el uso de los vecinos.

El titular del Ente de Desarrollo de la Cordillera, Pablo Zúcaro, informó que el trabajo fue pedido por la Gobernadora Arabela Carreras a partir de la problemática expresada por los vecinos de los barrios ribereños, referida a hechos de inseguridad asociados al sector y anegamientos con las crecidas.

“Es una tarea complicada, el lugar era inaccesible y se avanza lentamente cortando con motosierras, despejando y quemando los residuos, porque no es posible arrimar una chipeadora al lugar ni una máquina retroexcavadora”, describió Zúcaro.

Indicó que debido a esa complejidad el Ente coordina el trabajo con el DPA de la Provincia; y Parques y Jardines de la Municipalidad, acotando la limpieza a los sauces o ramas que están en peligro de caerse al río, o residuos forestales que forman gruesas capas y retienen sedimentos, formando diques.

“Hay que ser equilibrado en el trabajo, no puede entrar mucha luz de golpe al lugar porque eso hace proliferar los renovales. Se inició un mantenimiento que debe ser permanente, porque si no se hace el problema vuelve rápido”, señaló.

Reclamo de vecinos

Zúcaro dijo que la limpieza fue encarada “a partir del pedido de Juntas Vecinales linderas, en especial de los barrios 150 Viviendas, 84 Viviendas y Ruca Cura, por una cuestión de seguridad ciudadana, y se sumó también la necesidad de avanzar en seguridad hídrica, porque la formación de diques genera desbordes muy problemáticos en las casas”.

“Es un sector muy céntrico, por lo que además queremos recuperarlo y que en el futuro pueda hacerse un lindo paseo en un lugar que hoy no se conoce y podría ser de mucho disfrute en el verano”, afirmó.

Explicó que la tarea debió iniciarse luego de la veda de quemas del verano y la primera etapa tiene que terminar antes de que el río crezca y se ponga peligroso para los operarios.

“En esta primera etapa se avanzará900 metroshasta ‘La Islita’, donde está la capilla San Francisco de Asís, donde hay una bifurcación y mucho para limpiar. Hasta ahí queremos llegar antes del invierno, en los próximos 20 días, y luego en primavera completar hasta el barrio 150 Viviendas”, agregó.