Río Negro participó del primer taller nacional de conservación del delfín de Lahille (Tursiops gephyreus), una de las poblaciones de cetáceos más amenazadas del país. El encuentro permitió generar lineamientos concretos y prioridades de corto y mediano plazo para revertir su crítico estado de conservación.

La Secretaría de Ambiente y Cambio Climático formó parte del taller que reunió a científicos, organismos gubernamentales, ONGs, sectores pesqueros y aliados internacionales, con el objetivo de articular una estrategia integral para la recuperación de la especie. La jornada se desarrolló en el marco del Plan de Manejo para la Conservación (CMP) impulsado por la Comisión Ballenera Internacional, recientemente adoptado para esta subespecie.
Río Negro cumple un rol clave en la supervivencia del delfín de Lahille: la población de Bahía San Antonio representa el remanente más importante del país, con estimaciones de entre 100 y 150 ejemplares, casi la mitad del total nacional. Especialistas explicaron que, si bien la abundancia general se mantiene estable, los índices de natalidad son bajos y la renovación generacional resulta insuficiente para asegurar la viabilidad futura del grupo. Durante el workshop se analizaron amenazas prioritarias, necesidades de financiamiento, oportunidades de trabajo conjunto y mecanismos de articulación interinstitucional.
El encuentro aplicó el enfoque One Plan Approach de la UICN, que integra estrategias in situ y ex situ para maximizar los resultados. A partir de ese trabajo se delineó una hoja de ruta consensuada para los próximos cinco años, orientada al monitoreo, la reducción de amenazas, la participación comunitaria y la cooperación regional. La actividad fue organizada por Fundación Azara, Zoológico de Núremberg, YAQU PACHA y Fundación Mundo Marino, junto a investigadores y representantes de organismos vinculados a la conservación marina.