Desde el área de Educación Vial del Municipio saludan a quienes trabajan en concientizar a la comunidad y promueven la seguridad vial. “La educación vial es compleja y transversal”, reflexiona el equipo.
Cada 5 de octubre se conmemoran el Día de la Educación Vial y el Día del Camino. En 1925 el 1º Congreso Panamericano de Carreteras marcó el inicio de la expansión de las rutas del país y fue símbolo de integración entre los pueblos y el desarrollo. Asimismo, la fecha coincide con la creación en Argentina de la Dirección Nacional de Vialidad en 1932.
Desde el área de Educación Vial, dependiente de la Subsecretaría de Tránsito y Transporte de la Municipalidad, hacemos llegar un cálido saludo a todos aquellos que día a día ponen todo su esfuerzo en mejorar la forma de conducirnos, por que haya una toma de conciencia sobre los riesgos a los que nos exponemos diariamente y que son totalmente evitables. Y a toda la comunidad expresamos la importancia de desnaturalizar conductas riesgosas, recordando que la circulación vial la hacemos entre todos.
Además de estar orientada al conocimiento de señales y leyes de tránsito, la educación vial debe promover valores como el respeto por la vida y el otro. Es una asignatura pendiente en la mayoría de las escuelas del país. Diferentes leyes la declararon obligatoria desde 1986. Sin embargo, a pesar de algunos esfuerzos formales para introducirla en la curricula escolar, esta temática continúa resultando optativa en el sistema educativo.
La educación vial es una temática compleja y transversal que abarca mucho más que la mera transmisión de información de normativas y señales de tránsito. Cuando se brinda educación vial, se está educando para el cuidado de la salud, para la convivencia en el espacio compartido de la vía pública, y para el cuidado del medio ambiente humano.