Desde 1996, la Organización Mundial de la Salud celebra cada 20 de octubre el Día Mundial de la Osteoporosis, con el fin de concientizar sobre la prevención, diagnóstico y tratamiento de esta patología que es bastante conocida en la sociedad como enfermedad crónica, pero que también puede ser causa de discapacidad.
La osteoporosis es una patología que afecta a la estructura ósea de todo el cuerpo y se caracteriza por la disminución y deterioro de la masa ósea, que conducen a la fragilidad del hueso con un consecuente incremento del riesgo de fracturas.
En la infancia, adolescencia y en adultos jóvenes (hasta los 35 años) la creación de nueva masa ósea avanza rápidamente, pero con la edad, se va perdiendo esa velocidad, y comienza un desequilibrio que puede provocar osteoporosis. El desgaste del hueso más viejo hace más frágil la densidad ósea del cuerpo humano, ya que no se regenera a la misma velocidad que antes y el esqueleto queda más expuesto.
Se estima que a partir de los 50 años la masa ósea comienza a reducirse, y ello combinado con otros factores de riesgo, pueden generar esta enfermedad.
Esta pérdida de masa ósea ocurre en forma “silenciosa” (sin síntomas visibles) y es progresiva. A menudo no hay síntomas hasta que se produce la primera fractura. Las fracturas más comunes asociadas a la osteoporosis son las de muñeca, columna y cadera.
Una vez diagnosticada, la persona con osteoporosis debe tener especial cuidado con los golpes o caídas ya que su riesgo de fracturas es elevado.
Es una enfermedad crónica común y, algo que es menos conocido, es que puede ser causa de discapacidad.
Cuando la osteoporosis está muy avanzada la persona puede tener fracturas ante pequeños traumatismos, lo que muchas veces le impedirá desarrollar su vida diaria con normalidad (atención de la familia, trabajo, tareas cotidianas). Las fracturas ocasionadas por la osteoporosis pueden poner en peligro la vida y ser una de las principales causas de dolor e incapacidad a largo plazo. Por ese motivo, puede ser causa de discapacidad.
Existen tanto factores de riesgo como antecedentes familiares que aumentan las posibilidades de sufrir esta enfermedad.
Es fundamental conocer los factores de riesgo que sí son modificables para poder actuar de forma temprana, a saber:
- Tabaquismo
- Consumo excesivo de alcohol
- Bajo índice de masa corporal (IMC)
- Mala alimentación
- Déficit de vitamina D
Asimismo, desde la Fundación Internacional de Osteoporosis y desde la Sociedad Argentina de Osteoporosis, detallan cinco pasos a tener cuenta para la prevención:
- Realizar actividad física periódica
- Garantizar una dieta rica en nutrientes saludables para los huesos (calcio, vitamina D y las proteínas)
- Evitar hábitos negativos (mantener un peso corporal saludable, evitar el tabaquismo y el exceso de alcohol).
- Tomar Sol, para obtener Vitamina D
- Prevención de caídas
El Diagnóstico se realiza fácilmente a través de una densitometría ósea que mide la densidad del hueso y la evaluación clínica por parte del especialista permitirá saber si esa persona debe seguir un tratamiento o no.
Este día se celebra para difundir esta enfermedad a la que no se le presta la debida atención, ya que los cuidados deberían empezar durante la infancia y continuar durante toda la vida. Desde la Dirección de Gestión para Personas con Discapacidad acompañamos la propuesta de difundir sobre los factores de prevención, llegar a diagnósticos tempranos, y concientizar sobre la posibilidad de que la osteoporosis puede ser causa de discapacidad.